Los jubilados de Pdvsa en Carabobo se están muriendo. Al menos son dos al mes los que fallecen porque están entre la hambruna y la miseria.
Después de haber dedicado parte de sus vidas a la industria petrolera, hoy simplemente se quedaron sin beneficios.
“No tenemos ni seguro médico porque el de Sicoprosa lo suspendieron hace cuatro meses, aproximadamente”, denunció quien fue trabajador de la petroquímica del municipio Juan José Mora, Jorge Rodríguez.
La situación es crítica y sus números así lo confirman. “Estamos contribuyendo con una cuota de mortalidad de cinco o seis trabajadores jubilados de Pdvsa por semana en todo el país, mientras que en el complejo Pequiven de Morón son dos por mes, lo que quiere decir que en lo que va de año han fallecido 14 compañeros jubilados, solo de esa empresa, sin saber la cuenta de los compañeros de la refinería El Palito”.
Este drama, más allá de la eliminación del beneficio del seguro con el que podían ser atendidos en clínicas privadas, tiene mucho que ver con lo que ellos llaman “la expropiación” de sus recursos desde 2014, cuando Pdvsa se atribuyó la propiedad de los haberes gananciales que los empleados habían ahorrado en el fondo de pensiones.
A través de los intereses que genera ese fondo, creado en 1993, los jubilados de Pdvsa en Carabobo y en todo el país deberían devengar 660 dólares mensuales.
Pero no es así. Solo perciben 400 mil bolívares de pensión, más 800 mil bolívares de la tarjeta de alimentación.
“Eso no alcanza ni para sobrevivir, estamos en estado de subsistencia y es una falta de respeto, sadismo por parte del gobierno que estamos enfrentando en toda la geografía nacional”.
Un beneficio robado a los jubilados de Pdvsa
Rodríguez fue enfático: “Hacemos un llamado al verdugo Nicolás Maduro para que se ponga a derecho con nuestro dinero”.
Para este jubilado de Pdvsa en Carabobo, fue una burla de la administración del régimen al tomar posesión de los activos del fondo de pensiones sin consultarles a los trabajadores, y homologó los sueldos al salario mínimo.
A través de este fondo creado en 1993, los empleados ahorraron su dinero durante todos los años de servicio para poder tener una vejez digna.
“Ellos en el 2014 cambiaron el estatuto del fondo de pensiones y los haberes que eran nuestros los pusieron a nombre de la empresa. Nos deben alrededor de 1.340 millones de dólares de un préstamo que ellos hicieron del fondo y estamos exigiendo que nos paguen los intereses”.
Insistió en que ellos no están solicitando nada regalado.
“Lo que queremos es rescatar el fondo de jubilación contributiva que es de nosotros, no les estamos pidiendo aumento salarial ni que nos den nada gratis, es nuestro dinero que aportamos durante más de 20 años a un fondo que es privado y que el gobierno le puso la mano modificando los estatutos de ese fondo. Hoy reclamamos con indignación y rabia, los abusos y el incumplimiento de los entes estatales”.